Cuidemos nuestro Planeta.

Es una frase que se repite diariamente miles de veces en todos los rincones, pero definitivamente que no se hace nada.

Decía una frase que si cada personas barre el frente de su casa, pronto la calle estaría limpia, quiere esto decir que no vamos a alcanza ningún resultado hasta que cada persona concientice y haga todas aquellas acciones para mantener nuestro hogar en condiciones optimas para la vida.

Estas acciones son como la de botar nuestra basura en los lugares adecuado, no verter sustancias toxicas en mares y ríos, dejar la tala indiscriminada y reforestar nuestro medio mas cercano.

Esto no existe, no se hace, al menos en la mayoría de los países, se necesitaría una cultura individual, de la que contamos. Ningún gobierno, ningún acuerdo puede ser efectivo si no contamos con la cooperación de millones de habitantes del planeta.

En su momento dijimos que no iba a ocurrir ningún fin del mundo el el 12/12/12, pero de lo que si estamos seguros, es que la humanidad se encamina hacia un precipicio, del cual no abra  retroceso, que lástima, de lugar tan paradisiaco, que nos dieron por hogar y que autodestruimos por contentar a nuestro ego y acumular ganancias de formas desenfrenada, para derrocharlas de formas absurdas y excéntricas.

Hoy día palabras como las anteriores en un 90 % de los casos se repiten por gusto,  porque nada mas que pensamos en el presente, nunca en el futuro del hábitat de nuestro hijos, nietos o bisnietos, parecido como cuando tratamos de pasarle alguna información valiosa a nuestros hijos adolescentes, que ni siquiera nos hacen el menor caso.

Por eso cuando vienen los Testigos de Jehová con sus folletos de ilustraciones del paraíso en la tierra nos sorprende, pero en realidad no pintan nada extraordinario, es simplemente el esplendor de la naturaleza y que podemos ver en algunos lugares del planeta conservados por leyes y tratados, o zonas inhóspitas, poco visitadas, donde la virginidad impera.

Con pura nostalgia vivo, cuando recuerdo ríos y quebradas que en mi niñez estaban exuberantes y llenas de vida y que hoy día son cloacas malolientes y turbias.

Es cierto que se están haciendo cosas importantes, como el saneamiento de la bahía de Panamá, pero todavía acciones tímidas, para lo que seria necesario.

Me decía mi hijo, que le tenia miedo a los cangrejos, porque nunca había visto uno, y le respondía que son los cangrejos los que le tienen miedo al hombre y tratan de escapar cuando ven alguno, por eso la plaga mas grande que tenemos es sin duda la raza humana, que se cultiva en la gran olla de caldo del odio, la maldad y el resentimiento. Oremos.