Supuestamente vivimos un Mundo con un desarrollo vertiginoso a años de luz de siglos pasados, sin embargo existen datos que nos hacen meditar.
Hipócrates, el padre de la medicina que nació en el año 460 antes de Cristo y cuyos postulados llegan a la Medicina de hoy día, vivió hasta la edad de 107 años, algo para acotar un punto de referencia.
Y llegó a una edad envidiable por los millones de personas que habitan el planeta sin antibióticos, sin ultrasonidos, si radiografías, donde los diagnósticos se basaban en una observación análisis e implementación de un pensamiento médico con lo que se resolvían los problemas de salud.
Hoy día los médicos a veces se vuelven caricaturas de la practica médica, o como los semáforos, haciendo que los pacientes den mas vueltas que un trompo.
En estos días diagnostique y referí a una paciente con el diagnostico de una anemia Severa, solamente por la clínica, pero las personas que manejan estos programas quieren números, donde por suerte pudimos verificar por laboratorio y tenia 4 gramos de Hemoglobina de al menos 11 que es lo normal en las mujeres. Pero aunque los equipos nos señalen un resultado, llevamos los conocimientos de algunos de nuestros profesores, donde al final, lo que debe primar es los criterios diagnósticos de la propedéutica clínica, porque las máquinas o el error humano puede hacer la diferencia.
El desarrollo actual de las medicinas alternativas, es una de las muestras de que no somos la octava maravilla del Mundo, donde al igual que la obesidad, donde hay tantos tipos de tratamientos, sin dudas, es porque ninguno es efectivo.
Y nadie que haya nacido y vivido en una jungla de asfalto llega a los 100 años, por no decir a los 80. No tenemos piezas de repuestos y al final la mala vida, o la falta de cultura de salud, nos pasan la cuenta y salimos bien librados si llegamos al menos a los 70, en condiciones adecuadas, porque vivir postrados no es vivir.
Me contaba un amigo que su padre de 87 años vive en el campo y lleva un negocio de cría de puercos que le genera miles de dólares al mes, algo digno de alabar .Por ello damos gracias a Dios, porque pese a todas las inclemencias de nuestro tiempo, casi que vamos llegando a los 60, meta a la que nunca estuvo en mis expectativas.
Felicidades a todos los longevos de nuestro tiempo.
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